PhD. Mg. Ps. Miguel Muñoz Harrison
Psicólogo Organizacional, Magíster en Psicología del Trabajo...
En este día del trabajador, el docente de Adipa y profesional destacado, PhD. (C). Mg. Ps. Miguel Muñoz Harrison, realizó una columna de opinión analizando el escenario actual de nuestro país en relación a la salud mental en el ámbito laboral. ¡No te la pierdas!
La conmemoración del 1º de Mayo nos invita a reflexionar respecto a las principales problemáticas que aquejan al mundo del trabajo. Como punto de partida, es importante recordar que su origen es producto de la muerte de sindicalistas en Chicago, EE.UU. en 1886. Esto, en el contexto de las movilizaciones asociadas a la reducción de la jornada de trabajo a 8 horas diarias.
Durante esa época y fruto de la extracción del salitre, en Chile se vivía un periodo de desarrollo ligado a la industrialización y la urbanización, pero en el cual se acentuaban las diferencias sociales. Esta situación dio origen a la ‘cuestión social’, en la que se demandaban una serie de mejoras en el país, influyendo el fortalecimiento de los servicios sanitarios, el pago del salario en dinero, la indemnización por accidentes del trabajo y la abolición del trabajo infantil.
Como consecuencia, a inicios del siglo XX en el país tuvo lugar un fuerte desarrollo legislativo relacionado al mundo del trabajo, destacando la incorporación de la seguridad social como una garantía constitucional y la promulgación del Código del Trabajo. Estas iniciativas tuvieron por objetivo hacerse cargo y regular la asimetría de poder que los empleadores tienen por sobre los trabajadores.
Acorde a datos de la CEPAL y OIT, éstas y posteriores regulaciones han permitido posicionar a Chile como uno de los países de América Latina con mayor desarrollo en términos de condiciones laborales. No obstante, los cambios que ha vivido el mundo del trabajo han traído una serie de nuevos desafíos.
Específicamente, la apertura económica, la incorporación de tecnologías, los cambios demográficos, incluyendo los fenómenos migratorios, y el desplazamiento de la economía hacia sectores terciarios que han implicado un cambio en la naturaleza del trabajo, pasando éste de ser realizado de forma física a actualmente poseer un carácter principalmente cognitivo y emocional.
Dichos cambios en el mundo del trabajo han conllevado a que actualmente las patologías de salud mental, tanto de origen común como ocupacional, sean la principal causa de ausentismo laboral en el país. Aún más, los problemas de salud mental aparecen como aquellos que poseen la mayor cantidad de días de licencia médica. Esto, ha tenido efectos a nivel país, en el funcionamiento de las organizaciones y en las personas afectadas por alguna problemática de salud mental.
En base a estimaciones realizadas por la Cámara de Comercio de Santiago, en Chile el ausentismo asociado a la salud mental genera pérdidas anuales de aproximadamente USD $900 millones. Lo anterior, tanto por los costos directos relacionados a su tratamiento médico como por los costos indirectos asociados a pérdidas de productividad. Por orto lado, se ha identificado que esta problemática reduce la posibilidad de participar en el mercado laboral en un 20%, restringiendo así el acceso a una fuente importante de desarrollo personal, social y económico.
En este contexto, y en el marco de la incorporación del principio ‘entorno de trabajo seguro y saludable’ como un derecho laboral fundamental por la OIT, es que la protección y promoción de la salud física, mental y social aparecen como un eje fundamental del trabajo decente.
Esto, ya que dicho concepto es definido como la ‘oportunidad de acceder a un empleo productivo que genere un ingreso justo, la seguridad en el lugar de trabajo y la protección social para las familias, mejores perspectivas de desarrollo personal e integración social, libertad para que los individuos expresen sus opiniones, se organicen y participen en las decisiones que afectan sus vidas, y la igualdad de oportunidades y trato para todos, mujeres y hombres’.
Particularmente en Chile, la protección y promoción de la salud mental laboral han sido impulsados mediante el desarrollo y revisión de instrumentos públicos regulatorios y voluntarios. Entre ellos, destacan la actualización del protocolo de vigilancia de riesgos psicosociales laborales, la ratificación del Convenio 190 de la OIT, la norma NCh 3262:2018, la ley de reducción de jornada a 40 horas semanales, la ley y el reglamento sobre trabajo a distancia y el teletrabajo y la ley de conciliación de la vida personal, familiar y laboral.
En todas estas iniciativas, el principal aspecto común refiere a que tienen por objeto movilizar a los empleadores a analizar y gestionar sus condiciones de trabajo, las que por un lado pueden contar con el potencial de generar un daño en la salud mental de sus trabajadores. Por el otro lado, dichas condiciones permiten desarrollar ambientes saludables que promuevan el bienestar laboral, así como desplegar el potencial de cada individuo a fin de asegurar el bien común y la sustentabilidad.
Por lo tanto y transcurridos 125 años desde el 1º de Mayo fuese considerado como el día internacional del trabajo, la protección y promoción de la salud mental laboral aparecen como un tema prioritario para promover el trabajo decente. Esto, dado su impacto en el desempeño nacional y de las organizaciones, así como su elevada incidencia e implicancias en personas afectadas por esta situación.
A modo de cierre, cabe resaltar la complejidad que posee la protección y promoción de la salud mental y el bienestar laboral. Es decir, no solo resulta necesario contar con lineamientos regulatorios en esta temática, sino que también es clave evaluar su efectividad en términos de su capacidad de movilizar el fortalecimiento de los ambientes de trabajo y de entregar mecanismos para resolver los problemas que aquejan actualmente al mundo del trabajo. Asimismo, un aspecto a considerar refiere a revisar si se encuentran establecidos los recursos e infraestructuras suficientes para que las organizaciones puedan incluir esta temática dentro de sus prácticas organizacionales.
Finalmente, es importante señalar que el rol de los profesionales encargados de liderar esta temática no solo debe consistir en velar por el cumplimiento legal en el ámbito organizacional. Por el contrario, también debiese focalizarse en el fortalecimiento de condiciones de trabajo mediante el diálogo social de actores organizacionales claves, permitiendo así converger los intereses de empleadores, trabajadores y sindicatos, y en sensibilizar sobre la relevancia de esta temática.
Psicólogo Organizacional, Magíster en Psicología del Trabajo...
Sesiones 100% en vivo, si no puedes asistir, puedes revisar posteriormente la grabación en tu aula virtual.
Sesiones 100% en vivo, si no puedes asistir, puedes revisar posteriormente la grabación en tu aula virtual.
Sesiones 100% en vivo, si no puedes asistir, puedes revisar posteriormente la grabación en tu aula virtual.
Sesiones 100% en vivo, si no puedes asistir, puedes revisar posteriormente la grabación en tu aula virtual.
Los Sibshops son talleres recreativos especialmente diseñados para los hermanos y hermanas de niños con...
Mantener un ciclo menstrual adecuado ayuda que el resto del organismo también se encuentre en...
Es por eso que el autocuidado del terapeuta no es un lujo, sino una necesidad....
Valoraciones