Índice
- Introducción…..9.56
- Impacto del acoso callejero…..24.56
- Metodología de las 5D……34.05
- Terminar con el efecto transeúnte…….[54.22]
Introducción
[9.56] Según una ONG que desarrolló esta metodología, el 79% de las personas que han sufrido acoso informó que su situación mejoró después de recibir ayuda. Sin embargo, a pesar de que este porcentaje es bastante alto, solo el 25% de las víctimas recibió ayuda real. Esto crea una brecha significativa en la capacidad de ayudar a las personas que sufren acoso.
Hoy en día estamos aprendiendo sobre este tema, y nuestra misión es salir más preparados para responder sin ponernos en peligro. Sabemos que el acoso callejero es un fenómeno del que se habla mucho, y muchos lo hemos experimentado en carne propia o lo hemos presenciado. Es por eso que debemos profundizar nuestros conocimientos sobre este tema para estar mejor preparados para abordarlo de manera efectiva.
Impacto del acoso callejero
[24.56] Podemos identificar tres grandes áreas de impacto del acoso callejero. En primer lugar, está el impacto psicológico y de salud mental, que a menudo se presenta en forma de trauma. Las víctimas pueden experimentar síntomas de ansiedad o depresión, como resultado de la situación de acoso. A veces, simplemente caminar por la calle y pasar por un grupo de hombres puede generar una sensación de tensión, ya que recordamos experiencias previas de acoso.
En segundo lugar, podemos observar impactos en el ámbito social y económico, que a menudo pasan desapercibidos. Las personas pueden verse obligadas a cambiar su ruta de viaje o evitar ciertas áreas y horarios, lo que puede afectar su trabajo o sus estudios. Algunas personas han dejado trabajos o rechazado oportunidades laborales debido a la inseguridad que sienten al tomar transporte público. Todo esto implica un costo personal y económico para las víctimas.
Finalmente, el acoso callejero afecta nuestra calidad de vida y nuestra capacidad de interactuar en la sociedad de manera natural y sin miedo. Todos queremos vivir en un mundo en el que podamos saludar a una persona desconocida sin sentirnos incómodos o inseguros. Es importante visibilizar estos impactos y trabajar juntos para crear una sociedad más segura e inclusiva para todos.
Metodología de las 5D
[34.05]Estas pequeñas acciones pueden empezar a debilitar la cultura que hace que el acoso callejero persista.
En cuanto a la metodología, es un enfoque que ha sido desarrollado durante cinco años y les iré introduciendo el tema de a poco. Además, la idea es que puedan ir pensando cuál de las cinco D es la que más les acomoda, según su personalidad, experiencia de vida y habilidades.
La primera D es distraer, que consiste en crear una distracción para dejar en segundo plano la situación de acoso que estamos presenciando. La siguiente D es delegar, que implica encontrar a otra persona que pueda ayudar a lidiar con la situación. También tenemos documentar, que se refiere a crear documentación sobre lo que está sucediendo en torno al acoso, como grabar o tomar una fotografía. La cuarta D es dar asistencia, que es intervenir directamente para ayudar a la persona que está siendo acosada. Finalmente, la quinta D es la intervención que les dará muchas opciones, siendo la única que implica una intervención directa, mientras que las otras tienen una implicación menos directa, pero igualmente diseñadas para ayudar a la persona acosada.
Terminar con el efecto transeúnte
[54.22]La idea es que dejemos de ser transeúntes y pasemos a la acción. Antes de intervenir, es importante evaluar la situación y priorizar la seguridad, esto es clave. Si no te sientes cómodo/a interviniendo, existen otras formas de hacerlo. Por ejemplo, puede haber otra persona que pueda intervenir directamente, como hemos conversado previamente. Si ninguna de nuestras opciones te hace sentir seguro/a, está bien. La presión de tener que hacer algo no debe ser una carga, siempre tenlo en cuenta.
Es fundamental que seas consciente de lo que te lleva a actuar cuando presencias acoso. Pueden ser tus experiencias personales, convicciones ideales, entre otros factores. Tómate el tiempo necesario para saber cómo intervenir y evalúa cuál de las cinco estrategias funciona mejor para ti. Aunque todas y todos tenemos nuestro “súper poder”, es importante recordar que hay que ser flexibles y estar dispuestos/as a intentar otras estrategias que quizás no serían nuestra elección inmediata.
Valoraciones